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La delincuencia digital pareciera estar ganando la batalla y, aunque las empresas siguen preparándose para evitar o limitar los ataques, la realidad es que los mecanismos de penetración empresarial se hacen cada vez más sofísticados.

Sindy Acosta, especialista en Ciberseguridad de Palo Alto Networks, detalló, en el marco del II Congreso Internacional de Ciberseguridad, las cinco tendencias que darán dolores de cabeza a las compañías a nivel mundial este año.

La primera está relacionada con el Ramsomware y el aumento de la eficiencia de su actividad a partir de mecanismos de extorsión con ataques diseñados de forma intencional, segmentados y disruptiva que evade los esquemas de seguridad digital de las empresas. Anteriormente, un Ramsomware se liberaba y podía penetrar en cualquier parte, la tendencia ahora es focalizada, por industria, área, entre otros.

A este tipo se unen los intentos de penetración de las cadenas de suministro y la nube, ambas siendo cada vez más atractivas para los delincuentes, lo que está generando un incremento en la frecuencia y la sofisticación de los ataques digitales

Además de ello, Palo Alto considera que la velocidad de los ataques viene en incremento, cada vez más y más rápidos, amplificados por la automatización, la Inteligencia Artificial y la penetración de los ciberdelincuentas con un pool de herramientas claves que pueden ser indetectables.

Y la guinda del pastel: Corea del Norte. Anteriormente, Brasil, Rusia, entre otros, lideraban los envíos masivos de archivos maliciosos al mundo, pero desde hace un tiempo para acá provienen de Corea del Norte, que se ha convertido en uno de los más importantes líderes de los ciberataques a nivel mundial.

Y, nuevamente, la Inteligencia Artificial. Allí, la tendencia está en la escalabilidad y velocidad de penetración de un sistema, gracias a herramientas especializadas en IA.

“Los ataques evolucionan, se hacen más rapidos y si no nos preparamos, nos van a ganar la batalla” destaca Acosta y, además, puntualiza que las empresas deben apalancarse en herramientas tecnológicas e Inteligencia Artificial para disminuir los impactos, de lo contrario, el ciberdelito seguirá creciendo.

Al día de hoy, el 25% de los ataques provienen de la nube y el 85% de ellos tiene un impacto importante en el negocio, que se ha elevado de una manera exponencial. Acosta describe que hace cinco años, un ataque generaba un impacto de un 30% en el negocio, hace tres años el impacto alcanzaba el 50% y, hoy día, puede significar la desaparición de una empresa.

En ese sentido, lo único que tienen que hacer las empresas hoy, es invertir en Ciberseguridad, verla como una medida de prevenir los ataques y estar constantemente actualizadas en los temas y las tendencias que están marcando los ciberdelincuentes.