ANUNCIE AQUÍ

Tras una semana de llamadas, conversaciones y exigencias, los operadores lograron que el regulador Conatel flexibilzara el congelamiento de tarifas y permitiera que, una vez al mes, éstas fuesen actualizadas.

La medida inicial, que era el congelamiento de las tarifas de servicios por dos meses en primera instancia, contabilizando los precios de los planes al valor del dólar del 1ero de Abril, cuando la tasa estaba en Bs.69,77 por dólar, se mantiene, pero la decisión del regulador de aplicar esta tasa por dos meses ha sido cambiada.

Luego de algunos análisis y peticiones, el regulador decidió que la tasa a cobrar por las tarifas será la del primero del mes entrante, lo que permitirá que los operadores actualicen sus tarifas en Bs al cambio oficial del día uno del mes que inicia, es decir que en mayo las empresas podrán ajustar la tarifa que cobraron durante todo el mes de abril, al precio del dólar del 1ero de mayo.

Aunque la medida es menos grave que la anterior, que establecía congelamiento por dos meses sin esperanza de cambio, no deja de ser preocupante, pues las empresas, a medida que avanzan los días, terminan cobrando a sus clientes menos por cada plan contratado y, lo más grave, es que tienen que seguir pagando a sus proveedores al dólar variable del día del Banco Central de Venezuela.

En sintesis, las empresas mantienen sus tarifas congeladas al valor del primero de abril, pero para pagar a sus proveedores de enlaces, transporte, etc, tienen que calcular la tasa del día en el que van a recibir la factura y pagar, lo que les genera pérdidas, pues están cobrando a una tasa congelada, pero están pagando a tasa variable.

Sólo en los 14 días de abril, las empresas han dejado de ingresar cerca de nueve bolívares por cada dólar recibido, pues el tipo de cambio se deslizó desde Bs.69,77 a Bs.78, 36. En promedio, por cada factura emitida o plan cobrado prepago, los operadores pierden hasta hoy un 12,30%, monto que podría ser mucho más a fin de mes, pues apenas se está a la mitad de Abril.

Todo ello sin contar que ya las empresas están perdiendo o dejando de ingresar cerca de un 40% de cada factura, al cobrarlas a una tasa oficial mientras que el dólar no oficial sigue deslizándose y cuando éstas acuden a la banca a cambiar sus bolívares por dólares para invertir, entre otros, no hay certeza de que puedan obtener las divisas al dólar del día (con el que ya pierden tomando en cuenta el deslizamiento diario de la moneda), teniendo muchas de ellas que asumir la pérdida y en la mayoría de los casos no obtienen los dólares porque el mercado no cuenta con suficientes para surtilras, mientras que otras terminan en el mercado cripto, pagando por cada dólar lo que el mercado dicta que, en el caso de las criptomonedas, éstas se anclan al dólar más alto no oficlal.

Y es que para no cometer faltas ante el Seniat por temas de fiscalización, muchas empresas optan por no usar el dólar no oficial y prefieren ir al mercado de criptomonedas, asumiendo esa pérdida por cada factura de cerca de 40%, lo que además, genera que sus procesos de inversión disminuyan en la misma proporción, pues en vez de recibir unos 100 dólares por cada tasa en el mercado oficial, terminan recibiendo unos $60 por cada pago a dólar no oficial.

Es por ello que las empresas muestran signos de preocupación, sobre todo las más pequeñas, pues no tienen el músculo para soportar un periodo de tarifas congeladas más allá de los dos meses acordados inicialmente por el proceso electoral.